El delantero de Larraintzar llega a su primera final de primera y está en un gran momento de juego y quiere hacer algo importante.
Parece que ha llegado el momento de Peio Etxeberria, que tras jugar las semifinales tres años seguidos ha conseguido clasificarse para la gran final del Cuatro y Medio.
Una bonita oportunidad para un pelotari que lleva mucho tiempo creciendo y parece que ha madurado en la cancha, lo que le hace mucho más peligroso. Ha demostrado que ya no regala tanto y está centrado, con las ideas claras, por lo que es un rival temible para el resto.
Comenzó el campeonato con el primer partido de la liguilla, donde se impuso con claridad ante Jaka en Soria. Su segundo partido fue la piedra de toque, después de varios intentos, consiguió la victoria ante su grna amigo Ezkurdia, actual campeón y uno de los favoritos al título, lo que dejó bien a las claras sus intenciones.
No jugó el tercer partido, ya clasificado como primero para semifinales, por la lesión de Salaberria. Y ya en semifinales consiguió vencer a Peña II en Vitoria para llegar a la gran final con muchas ganas e ilusión. Sabe que enfrente estará el favorito Altuna III, pero seguro que se deja todo en la cancha para intentar hacer algo grande.
Peio Etxeberria ha demostrado con su juego que está entre los primeros espadas por méritos propios, siendo un fijo en las rondas finales del Cuatro y Medio, jugando mucho mano a mano, y siendo titular en el parejas, donde la competencia en su empresa es feroz.
Habrá que ver como gestiona el jugar por primera vez una gran final, pero si sale centrado y jugando como hasta ahora hay que jugar mucho para meterle mano.