Pleno guipuzcoano en una segunda jornada del Memorial Goñi que ha vuelto a congregar mucho público en las gradas del frontón Beloki.
Tras el festival de esta tarde, Ekhi Irribarria y Elola-Irazustbarrena completan unas semifinales que les llevará a enfrentarse a Iker Egiguren e Igoa-Cuairan tras sus solventes victorias ante Etxeita (22-10) y Murua-Morgaetxebarria (14-22).
En el partido de elites por parejas, la explosividad de Iñaki Elola ha permitido al de Bidania y un sólido Irazustabarrena remontar un partido que se les había puesto muy cuesta arriba en el 12-6, pero que han sacado adelante con un espectacular parcial de 2-16, con el delantero cambiando el signo del partido, muy bien secundado por el zaguero de Alegia, que incluso ha pegado un rebote en el 13-18 que no es nada habitual en estas categorías. En un partido de dos partes muy desiguales, Elola ha vuelto a mostrar sus dos caras, una primera muy precipitado y cometiendo errores de bulto y una segunda en la que, colocándose en el centro de la cancha, ha puesto una marcha más que sus rivaes no han podido seguir con sus voleas, dos paredes y pelotazos largos con los que ha dado la vuelta al partido.
Enfrente, Murua y Morgaetxebarria han dejado detalles, al zaguero le ha costado dar altura a sus pelotazos pero ha mostrado tener dos buenas manos, aunque ha dejado de restar algunos saques y Murua se ha visto superado por el vendabal Elola.
En la categoría de promesas dentro del cuatro y medio, el próximo 30 de marzo tendremos una semifinal entre los hermanos de dos pelotaris que actualmente son profesionales, después de que Ekhi Irribarria se deshiciera con solvencia, 22-10, de Etxeita.
Iker Egiguren será su rival en el partido por hacerse con un hueco en la final. Como la semana pasada, al partido le ha faltado algo más de emoción, ya que el de Arama ha tomado el mando del partido desde el primer pelotazo 5-0 y 10-3. A pesar de ser tres años más joven que su rival, al goierritarra la pelota le ha salido a otra velocidad de la mano y, sin la necesidad de tomar grandes riesgos, apenas ha entrado de aire, le ha bastado tener al rival lejos del frontis para tener el partido controlado. El de Zeanuri, por su parte, nunca ha estado cómodo sobre la cancha, desde el saque ha estado sin poder coger su sitio y no ha podido ante un rival que ha jugado un partido muy serio.