Cualquiera que haya pasado más de un par de horas en un aeropuerto sabe que la espera puede hacerse interminable.
Tal vez llegaste con mucha antelación, tu vuelo se ha retrasado o simplemente tienes una escala larga. Sea cual sea el motivo, en lugar de desesperarte mirando el reloj o dando vueltas sin rumbo, ¿por qué no aprovechar ese tiempo? Los aeropuertos pueden ofrecer mucho más de lo que parece a simple vista. Aquí tienes algunas ideas sencillas y prácticas para que el tiempo pase volando.
Descubre las tiendas y zonas duty free
Los aeropuertos suelen contar con una gran variedad de tiendas que van más allá de lo típico. Desde perfumes exclusivos y productos de belleza hasta accesorios de diseño o souvenirs locales, dar una vuelta por estas tiendas no solo es entretenido, sino que puede ser la oportunidad perfecta para comprar un detalle para alguien… o para ti mismo. Y si tienes suerte, incluso puedes aprovechar algún buen descuento en productos libres de impuestos.
Come algo delicioso (o simplemente disfruta de un café)
La oferta gastronómica en los aeropuertos ha mejorado muchísimo en los últimos años. Ya no se limita a comida rápida: hoy puedes encontrar desde cafeterías con encanto hasta restaurantes que sirven platos locales o internacionales. Comer algo sabroso o tomarte un buen café con calma puede ser justo lo que necesitas para desconectar y relajarte antes del vuelo.
Disfruta de un juego en el móvil
Tu smartphone puede ser tu mejor aliado en momentos de espera. Si te descargas algunos juegos con antelación —ya sean de estrategia, puzzles, o simplemente algo relajado como el bingo— tendrás entretenimiento asegurado. Además, muchos aeropuertos disponen de zonas de carga, así que no tendrás que preocuparte por quedarte sin batería.
Observa a la gente y déjate llevar por el ambiente
Pocos lugares son tan diversos y llenos de historias como un aeropuerto. Siéntate cerca de una zona concurrida y observa a los viajeros: sus despedidas, sus reencuentros, sus prisas… Puede parecer una tontería, pero es una forma curiosa y hasta meditativa de pasar el rato.
Ponte al día con la lectura
Ya sea en papel o en formato digital, una buena lectura siempre es bienvenida. Si no llevas nada contigo, muchos aeropuertos tienen librerías o quioscos donde encontrarás desde novelas hasta revistas o guías de viaje. Es el momento perfecto para sumergirte en un libro.
Practica la atención plena o relájate
Si sientes que el estrés te puede, busca una zona tranquila y dedica unos minutos a respirar profundamente o a meditar. Muchos aeropuertos incluso tienen salas de relajación. Un pequeño momento de mindfulness puede ayudarte a afrontar el vuelo con más calma.
Navega, trabaja o actualiza tus redes
Gracias al wifi gratuito que ofrecen la mayoría de aeropuertos, puedes revisar tus correos, trabajar un poco o simplemente ponerte al día en redes sociales. Incluso puedes aprovechar para subir alguna foto o compartir tu experiencia viajera.
Pasea o explora la terminal
Caminar te ayudará a estirar las piernas y despejarte. Algunos aeropuertos cuentan con jardines interiores, exposiciones temporales o zonas de descanso realmente agradables. ¡Explora más allá de tu puerta de embarque!